La metodología base de la prueba, radica en la toma de un cultivo de exudado nasofaríngeo u orofaringe y al transcurrir un tiempo de entre 10 a 15 minutos se obtiene un resultado de respuesta cerrada confirmando el diagnóstico de infección por el virus de COVID-19.

Las pruebas pueden realizarse en casa, eventos, centros de trabajo o negocios.